La adaptación a los cambios, desatada simultáneamente y en concierto, para sobrevivir dentro del mundo empresarial fue uno de los resortes que provocó esta nueva revolución denominada: “transformación digital de triple impacto”.
Esta tendencia en constante desarrollo tiene como objetivo convertir a las empresas en agentes regeneradores como organizaciones que dejarán huella no solo en la economía, sino también en el medioambiente y la sociedad.
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La transformación digital de triple impacto se identifica a través de dos áreas: transformación digital y sostenibilidad. Sus bases se construyen desde el aprovechamiento de las nuevas oportunidades de negocio utilizando novedosas tecnologías, las que tienen como resultado estrategias y objetivos que entregan un valor cada vez más esencial para las empresas y el entorno en la que ellas se encuentran.
En tal sentido, la transformación digital de triple impacto, se basa en rediseñar los modelos y procesos comerciales mediante el replanteamiento de las tecnologías digitales. Esto asegura que la organización sea humana, sustentable, renovable y perdure en el tiempo, dejando un valioso legado para las generaciones venideras. Dentro de los beneficios de su implementación sobresalen:
- Negocio próspero y evolutivo con legado.
- Optimización de ineficiencias y en consecuencia mayor competitividad.
- Lealtad y compromiso del equipo.
- Mejorar el posicionamiento y conectar con clientes desde un lugar más profundo.
- Aumento de productividad en todas las áreas.
- Escalabilidad del negocio.
- Automatización y visibilidad de procesos.
- Traspaso en la gestión generacional.
- Mejora para todos los stakeholders.
- Aporte a la comunidad.
- Legado a futuras generaciones.
Del comercio tradicional al e-commerce: un ejemplo de adaptabilidad en tiempos de pandemia
Para estudiar, tanto la evolución como el impacto de este proceso, es necesario analizar la mutación de muchos comercios desde su estatus tradicional a sus sucursales virtuales en tiempos de pandemia. Esta transformación representa el ejemplo ideal para mostrar el antes y el después de la adaptabilidad y su impacto en las empresas que apuestan por este cambio.
Y es que, en las últimas décadas, el comercio electrónico ha aumentado debido a la adopción generalizada de tecnología digital entre empresas y particulares. Los beneficios del comercio electrónico son muchos, ya que brinda a los consumidores nuevas formas de acceder a ofertas más amplias y precios más bajos para productos y servicios, además de mejorar la experiencia de uso del consumidor en diferentes aspectos.
Para las empresas, en cambio, este medio permite nuevos canales para promocionar y distribuir sus productos, reduciendo los costos de transacción y aumentando su mercado. Sin embargo, todavía existen algunos segmentos (por ejemplo, el comercio minorista), donde, incluso en los países desarrollados, el comercio electrónico representa una participación limitada del comercio en general.
Debido al COVID-19, muchas empresas, y en especial las MIPYMES, en sectores como el de gastronomía y comercio, debieron adaptar sus modelos de negocios a las restricciones de movilidad, creando canales de venta digitales para continuar con sus operaciones.
Lo anterior generó un crecimiento del comercio electrónico, que también ha sido utilizado por plataformas digitales en diversos segmentos intermediarios como logística, pagos digitales y transporte, entre otros. Por su parte, la pandemia ha visto cambios vertiginosos en los hábitos de consumo de las personas, fomentando el uso de estos canales para acceder a productos de interés y gestionar sus compras.
Del mismo modo, no solo se observa un aumento en la frecuencia con la que los consumidores buscan y compran en línea, sino también un cambio en las preferencias por el tipo de productos adquiridos, en los que los artículos de salud tienen más demanda, seguidos de alimentos, electrónica, muebles y fitness.
En Chile, la Cámara de Comercio de Santiago indicó que las compras con tarjetas de débito y crédito en tiendas online aumentaron un 100% a principios de abril del 2020 y aumentaron un 214% para mayo de ese mismo año.
De los correos electrónicos a la Industria 4.0: la revolución de las tecnologías digitales avanzadas
Pese a los evidentes avances en este sentido, no pocos se han preguntado porque deben digitalizar su empresa. En términos abstractos, la respuesta se centra en que la tecnología digital puede crear oportunidades de mejora en todas las áreas de operaciones comerciales ofreciendo una multitud de usos y aplicaciones.
Entonces no se trata solo de tecnologías innovadoras, sino de la combinación de soluciones diversas que pueden adaptarse a cualquier negocio. Esquemáticamente, los principales beneficios potenciales pueden redirigirse a tres áreas operativas: organización, tecnología de producción y capacidad de aprendizaje.
Las tecnologías ayudan a dar:
- una mejor visibilidad
- un mejor acceso a la información
- potencial para reducir barreras tradicionales al comercio
- facilitación de transacciones financieras
- mejora del desempeño comercial, crecimiento y expansión
- capacidad de desarrollar nuevos productos
En términos de mejora de los procesos de fabricación, la digitalización permite a las empresas reconfigurar sus recursos para responder más rápidamente a escenarios críticos. Por ejemplo, la tecnología de la información reduce los costos de coordinación en las empresas y promueve la asignación flexible de recursos.
Se puede lograr un efecto similar en la gestión de relaciones con los proveedores. En este contexto, reconfigurar los procesos, productos y servicios de fabricación disminuye significativamente la dificultad y el costo de cambiar recursos, variaciones de diseño o modelos o ajustes de tamaño del lote de producción.
Finalmente, la digitalización tiene el potencial de ser beneficiosa en el sentido de que amplifica las capacidades dinámicas de las empresas. Primero, la digitalización hace que empresas sean conscientes de los cambios ambientales. La gran ventaja de los recursos digitales en términos de volumen, velocidad, variedad y valor permite a las empresas recopilar o recuperar información del entorno externo a bajo costo. Además, la aplicación del análisis de big data y el sistema de inteligencia artificial, ayuda a las empresas a filtrar información valiosa a través de computación de alta velocidad, de modo que pueda percibir y predecir cambios en el campo del medio ambiente hasta cierto punto.
Incluso, otro beneficio relacionado con la formación de capacidades dinámicas, se refiere a la capacidad de reorganizar capacidades y estrategias de innovación para agregar valor a los productos y servicios que brindan las PYMES. La tecnología digital permite a las empresas expandir sus redes y expandir sus capacidades de información de forma prácticamente ilimitada, tanto hacia nuevas áreas de conocimiento como hacia áreas de especialización que fueron incorporadas a la empresa.
Para las empresas que ya tienen integrado en una red de colaboración, la tecnología digital puede mejorar el compromiso y brindar una experiencia integrada para administrar recursos compartidos, como inventario, suministros o servicios especializados, o programas de capacitación diseñados específicamente para la cadena de suministro.
Medir la huella digital
Si bien sumergirse en el mundo de la digitalización es un proceso de aprendizaje arduo y continuo, también implica una concientización sobre los impactos que ello produce. Sabemos los enormes beneficios de la transformación digital, pero tenemos que reconocer también sus impactos, medirlos, reducirlos y compensarlos si es necesario.
Para disminuir la huella de carbono digital es recomendable generar nuevos hábitos en el uso que le damos a nuestros dispositivos móviles, y en especial, al almacenamiento:
- Elimina los correos y mensajes antiguos de las plataformas de mensajería
- Opta por un sistema de hosting verde
- Renueva el sistema eléctrico de tu empresa u hogar, en la medida de lo posible, por uno que sea renovable
- De vez en cuando, elimina fotos y documentos o mensajes de tu computador y dispositivos móviles que ya no te sean útiles
Con pequeñas acciones el impacto de la transformación en las empresas, y más en la era digital, irá de la mano en la construcción de una sociedad más consciente y preocupada. Además, la imagen de tu empresa u organización tendrá un factor diferenciador con el resto, ya que mejoras tu responsabilidad ante el medioambiente.
